Amanecía nublado y con unas temperaturas agradables para los numerosos participantes que se reunieron en la parada de El Burgo este domingo. Domingo de la Copa Riazor Viva Bike; pero pronto las cosas se iban a torcer. Y es que cuando el grupo llegó al lugar de la salida enfrente de la Flex en la N-VI comenzó a llover fina pero constantemente. No había plazas suficientes para resguardarse en la marquesina del autobús, así que tras la foto de rigor se dio comienzo a la clásica.

Inicialmente se rodó a ritmo pausado y de forma compacta hasta la Villa de Betanzos donde, tras cruzar el Mandeo y girar a la derecha tras el puente de piedra, se comenzó a escuchar el ruído generalizado de cambios subiendo piñones y algún que otro apriete de zapatillas.

Isaac y Manolo Prieto tomaron entonces la cabeza del pelotón y antes de llegar a Paderne ya habían hecho trizas la clásica con una facilidad pasmosa. Tan sólo Fran Ferreiro, Miguel Fernández, Javier Romar y Roberto Souto se engancharon como buenamente pudieron a sus veloces ruedas. Por detrás, cada participante buscaba su sitio y se formaron varios «grupettos» perseguidores. Pelucas, Tomás y Víctor eran la segunda avanzadilla. Seguidos de Félix, Man, Hector y Ferreiro.

La subida (10,2km al 4%) continuó a ritmo para el grupo cabecero y alguno de los riazores comenzaron a acusar la larga ascensión; Roberto cedía unos metros y por delante Manolo e Isaac se despegaban sin problemas de Miguel y Fran, que sufrían «a demanda» de los primeros.

En la ermita de San Cosme la situación se mantenía similar, pero el rápido y mojado descenso a Irixoa daba un pequeño vuelco a las posiciones. Con una espectacular remontada desde atrás, Javier Romar alcanzaba a Manolo, Isaac y Miguel, que se disponían a afrontar los repechos en dirección a Santa Juliana. Roberto y Fran marchaban a escasos segundos.

Por detrás, el trio perseguidor seguía compacto y a ritmo, aunque esto no iba a seguir así por mucho tiempo.

La penúltima ascensión, a Penafesa desde Santa Juliana (3,3km al 5%), pasó un poco de factura a Javier, que se quedó ligeramente cortado. Miguel también acusó un poco el esfuerzo y trataba amargamente de engancharse de nuevo a la cabeza de carrera.

Por detrás, un gran Félix en una espectacular subida se reenganchó al trio perseguidor.

El descenso posterior produjo un pequeño reagrupamiento, y las primeras rampas del Alto de Camposa do Foxo (3,6kms al 6%) las afrontó un grupo compuesto de 4 integrantes, con Roberto a escasa distancia y Fran un poco más descolgado.

Esta subida final no alteró la clasificación final de la prueba en este grupo cabecero, sino que terminó de agotar las escasas energías de gran parte de los participantes, por lo que los ataques no fueron ya posibles.

Más atrás, estaba claro que Pelucas no había dicho la última palabra y tenía que probar como estaba la fruta del árbol, y en las rampas de Camposa do Foxo atacó. Pero un gran Félix con un ritmo continuo anuló la aventura del guerrero Pelucas, llegando en grupo al final de la Clásica.

Sin duda esta 7ª prueba de la Copa Riazor es tal vez una de las más duras del calendario… y aún había que regresar a casa. A estas alturas la lluvía ya había calado hondo y la vuelta prometía ser «pestosa» y pasada por agua.

                                                                                                           Crónica por Miguel Ángel Fernández

CLASIFICACIÓN CLÁSICA SERRA DA LOBA

GRUPO 1

Isaac (No socio)

 

GRUPO 2 (20 puntos)

Romar

Manolo Prieto

Miguel Fernández

 

GRUPO 3 (17 puntos)

Roberto Souto

 

GRUPO 4 (15 puntos)

Fran

 

GRUPO 5 (14 puntos)

Félix

Pelucas

Tomás (No socio)

Víctor

 

GRUPO 6

Héctor (No socio)

 

Grupo 7 (13 puntos)

Man

Ferreiro